Y la espera finalmente acabó. Tuvieron que pasar veinte, sí, veinte años para poder por fin conocer nuevo material en duración prolongada de Javier Ibarra Ramos, a quien todos aquí conocemos como Kase.O. El emcee prodigio del barrio Jesús, Zaragoza, se dio a conocer con dos referencias autoeditadas en su adolescencia. Primero en el 93, a sus trece años, con Rompecabezas, consiguiendo rápidamente el prestigio local. Un par de años después, con apenas quince, se consagraría como una de las más prometedoras figuras del rap ibérico al deslumbrar a la escena con su segunda maqueta: Dos Rombos.
Desde entonces su carrera en solitario se vio interrumpida sólo por el éxito conquistado junto a su grupo Violadores Del Verso –con Lírico, Sho–Hai y RdeRumba—, reconocidos desde sus orígenes como unas de las principales influencias del rap en habla hispana, quienes entre los años 1998-2006 editaron tres LP’s, seis maxis y tres DVD’s (uno junto a la banda de trash metal Soziedad Alkoholika), además de protagonizar centenares de giras y carteles alrededor del globo.
Texto y fotografías por Darío Gutiérrez O. (a.k.a. Güissario Patiño).
Veinte años no es nada, dicen. Si bien la esperanza de escuchar el álbum debut de Kase.O siempre ha estado albergada en la nómina de pendientes del oyente de rap hispanoparlante, Javat ha sido el primer y principal responsable de alimentarnos aquel anhelo, más concretamente desde la publicación de su sencillo “Mierda” en el año 98 (single de diez minutos de duración que prestó el argumento para su recordado –y superado— beef con Metro de Geronación). Aquel registro se insinuaba como la antesala de algo aún pendiente por venir. Desde entonces el coqueteo se extendió a docenas de colaboraciones, algunas de culto que sobreviven en los playlists de rutina, mientras otras se compilan en selecciones no oficiales que han calmado las ansias de algunos fans del ciberespacio, sin embargo, el sello a toda esta prometedora primera fase en las búsquedas creativas del señor Ibarra lo puso el proyecto Kase.O Jazzmagnetism, la banda de jazz que lo acompañó durante los últimos cinco años en exitosas giras que reversionaron varios de los clásicos y rarezas de su curriculum musical. De dicha experiencia se editó a fines del 2011 un álbum de quince cortes. Kase.O Jazzmagnetism cosechó elogios no sólo en su España natal, sino que colonizó con la energía de su directo todo el continente Latinoamericano, coronando dicha etapa con sus dos últimas presentaciones celebradas en Colombia en diciembre del 2015, país donde éste se radicó e inició una nueva vida, al mismo tiempo que ha podido reconectarse con el Hip Hop en estado puro para encontrar la inspiración que determinará su primera producción en solitario.
“Ya ves que me cuesta escribir párrafos nuevos”
Y bien, finalmente llegó el momento de dejar el reciclaje de lado para volver a sorprender, pero con novedades. Así llegó en octubre del 2015 Previo, el maxi que confirmó la preparación de su primer álbum de rap en solitario.
Bastó nada más con tres canciones para disipar cualquier interrogante sobre el presente creativo de Javier Ibarra. Recuerdo aquellos días de octubre y la campaña promocional que lo ponía cada semana en la noticia con el estreno de un nuevo track. Llama la atención cómo su figura toma la connotación de deidad para la mayor parte de los oyentes de rap en nuestro idioma. Es algo que puede leerse exagerado, tal vez, pero se hace difícil describirlo de cualquier otra forma. De pronto eres testigo de cómo todas las perspectivas y nuevos nichos que ha ido tomando el rap en español vuelven a coincidir en un mismo punto o referencia común. Vuelve Kase.O y con ello la fe en el Hip Hop se recupera como por acto de la naturaleza, y los que hoy se apuntan como influencias regresan a su condición de fans. Resulta sencillamente sorprendente el poder y la importancia de la presencia de Ibarra en el desarrollo del rap hispano, porque habita una posición hasta hoy sin precedentes. Entonces te pones a pensar: ¿qué es lo que tanto ha hecho este personaje para gozar dicha responsabilidad si ni siquiera nos ha compartido aún su primer disco? Y me replanteo la interrogante: ¿qué es lo que realmente ha sucedido en la historia del rap hispano que no existen dos como él? Pues más allá de las preferencias personales, su legado es el de un exponente fundamental, merecedor de respeto y atención, de movimientos difícilmente cuestionables. Consecuencia de ese “efecto Kase.O” es el revuelo que genera un notición como el anuncio de la fecha de lanzamiento y nombre de su primer disco, algo que me sigue pareciendo inaudito, pues vemos como todos los países hoy se alinean para hacer eco de un mismo titular.
Kase.O se acerca:
“Ahora lo que viene es el disco de rap de Kase.O. Javi tiene que hacer su disco de rap… y ése sí que tiene presión, ¿vale?” – sentenciaba con ironía RdeRumba en la entrevista que compartimos en su visita a Chile de mayo pasado. Sus compañeros de grupo lo comprenden y respaldan. Ellos son las cuatro columnas del templo que se grafica en la ilustración de Pedro Rodríguez, el cual inserta entre un conjunto de figuras y simbolismos que encierran el arte y conceptos de El Círculo, título del álbum que Kase.O estrenará el próximo 23 de septiembre.
Ya no hay tiempo para especulaciones, pues septiembre llegó con esa confirmación, sinónimo de que hoy es el día en que Javier Ibarra ha conseguido satisfacerse con el resultado de sus procesos personales y creativos, resultados que lo ponen como director y protagonista de su opera prima tras más de dos décadas de preparación para llegar a ella. Expectativas, claro que las hay, pero diría que éstas van más allá de calificar si el estilo y las temáticas gustan o no, puesto que la incansable búsqueda de sí mismo de uno de los artistas más prometedores del panorama ya es toda una experiencia que ha tenido la facultad de desestructurar todo orden establecido en la materia. El Círculo en su concepción se alejó de ser el hit con la fórmula fácil que es acomodarse en el talento y el prestigio. El Círculo en su concepción es descubrir tu propia verdad. Es Zaragoza como lo es Medellín, es ser la estrofa más esperada en una canción de Violadores Del Verso y a la vez ser un completo anónimo, es atreverse a reaprender, a ser alumno, individuo, familiar y amigo, serlo todo siendo nada. El Círculo en su concepción, aún sin escuchar su contenido, es el álbum más esperado de Hip Hop, porque Hip Hop fue su proceso, y de paso, un capítulo nuevo para direccionar el curso de esta historia: “Mi plan es el siguiente: me como la semilla o de pronto la planto para que coma más gente”.
KASE.O – EL CÍRCULO | TRACKLIST
01. Intro (El círculo) | Prod. Javato Jones & Gonzalo Lasheras
02. Esto no para | Prod. Cash Flow
03. Yemen | Prod. El Arkeologo
04. Triste | Prod. Juez One, Co-prod. Javato Jones & Gonzalo Lasheras
05. Guapo tarde | Prod. Diego Lino alias Teórico
06. Viejos ciegos (con Xhelazz & Sho-Hai) | Prod. Big Hozone
07. Interludio (Quieren copiar) | Prod. Javato Jones
08. Pavos reales (con Hermano L, Shabu One Shant & McKlopedia) | Prod. Crudo Means Raw & Kase.O
09. Mitad y mitad (con Najwa) | Prod. Javato Jones & Gonzalo Lasheras
10. Mazas y catapultas | Prod. Javato Jones & Gonzalo Lasheras | Coro flamenco por Sara Díaz, Irene Reyes & María López
11. Amor sin cláusulas | Prod. Javato Jones & RdeRumba
12. No sé qué voy hacer (Booty song) | Prod. Javato Jones & Gonzalo Lasheras
13. Interludio (Risoterapia) | Prod. RdeRumba – Idea original Kase.O
14. Rap superdotado (con Violadores Del Verso) | Prod. RdeRumba
15. Repartiendo arte | Prod. Juez One, Kase.O & Gonzalo Lasheras, Co-prod. Juan Rodríguez Berbin
16. Basureta (Tiempos raros) | Prod. Javato Jones & Gonzalo Lasheras
17. Outro | Prod. Crudo Means Raw