La curva creativa de Hugo Rodríguez continúa en ascenso y cosechando resultados a su paso. Tras la positiva acogida que tuvo su “Tarde nublá” estrenada en febrero pasado, el emcee y productor de 20 años reaparece con un nuevo sencillo de nombre “One shot”, una visión reflexiva en donde la autodeterminación juega un rol crucial para validar el camino recorrido y seguir hacia el frente escuchando el instinto personal, callando las voces externas que buscan imponer un modo o suprimir el propio.
Por Darío Gutiérrez O. (a.k.a. Güissario Patiño).
Agradecimientos a Mingala Comunicaciones.
Inicié esta canción en un periodo previo al estallido en el que, personalmente, aprendí mucho, ya que en la universidad les estudiantes tuvimos un conflicto político importante y pude observar de cerca como los peces gordos miraban hacia el otro lado y se hacían los sordos. Entonces, en varios pasajes de “One shot” abarqué eso, el decir que quieren controlarte, por ejemplo. Luego del estallido –en el cual con mi equipo estuvimos presente prácticamente todos los días—, sale el estribillo, que dice frases como “Te están buscando, go get ‘em. Quieren quitarte lo que es tuyo, don’t let ‘em”; debido a la represión que sufrimos aquellos que nos aburrimos y no nos quedamos callados. Pero el tema en términos netos no pasa exclusivamente por ahí, ya que en ese período tuve tiempo para deambular por las calles y pensar mucho en cómo la gente actúa en general, esa frialdad, a veces indiferencia, o en esa transición en la cual de a poco se convierten en lo que criticaban. En fin, son reflexiones varias.
Al igual que sus anteriores singles, “One shot” también fue autoproducido por Delta en Arion Studio, buscando un sonido que no lo encasille en un oyente estrictamente rapero, sino que le de la fuerza para que su mensaje trascienda hacia todo público. El estreno se acompaña de un vídeo clip realizado por su pandilla audiovisual Nunca Fuimos Artistas en colaboración con GutiérrezFilmz, abordando la personalidad artística del autor para proyectarla en una dimensión cinematográfica.
El video busca retratar un conflicto interno y la disputa de dos personajes por este “One shot”. En él nos referenciamos del clásico de David Fincher, “Fight Club”, para usar un par de códigos narrativos y distanciar a los personajes por su lenguaje audiovisual. Los contrastes de los personajes están representados en vestimentas, estéticas, colores y los escenarios. Aquí destaca la participación del mismo director, “el Wech”, quien aparece con máscara y guantes de box, el cual representa el respaldo y apoyo de la crew Nunca Fuimos Artistas en este conflicto.