David Esteban Wehrmeister, a.k.a Síndrome, ha dado un gran golpe en el inicio de este 2021 con el lanzamiento de su disco Versatilidad el pasado 17 de enero, una compilación de canciones grabadas y producidas en el Laboratorio Underground por Jotaose Lagos. A grandes rasgos (como si fuera posible), este trabajo hace honor a su título, siendo el despliegue de hazañas versátiles por parte de Síndrome donde transita por composiciones y acordes de guitarra, con formas complejas de ejecución y acompañamiento que calzan a la perfección con cada palabra, como también beats de rap que dejan ver la capacidad de movimiento con la que cuenta el presente creador.
En el desarrollo de su álbum, Síndrome muestra su paso por diferentes regiones del sur de Chile que han forjado procesos de su vida y experiencias que permiten la inspiración necesaria para que fluyan las escrituras, acompañándose de la guitarra y transitando de manera espontánea en una triangulación de caminos recorridos, sentimientos encontrados y su actual madurez, que al confluir todas se juntan en composiciones originales tales que logran tener sentido y coherencia.
Desde Calbuco, Síndrome se presenta con un trabajo original que busca generar algo diferente en cada quien que se sienta a escucharlo, porque en cierta forma exige eso: atención y análisis de cada letra. Es un disco que escapa de la convencionalidad del rap y explora otras figuras rítmicas, otras combinaciones que fácilmente no se logran encontrar, vivenciando momentos en las calles de Chiloé, Concepción o Puerto Montt, entre otras, que entregan lo real de cada track.
En el siguiente resumen, repasamos Versatilidad de Síndrome canción por canción con algunas observaciones del autor sobre su proceso de creación:
Versatilidad comienza con “Esta soledad”, muestra de alguien que en compañía de la luna intenta dar cara al dolor. Una composición que salió en cosa de minutos, con el dolor del alma y la luz de la noche en la playa Punta de Lapas, Quellón, vivenciando la existencia de una fuerza que otorga la costumbre mientras todo pasa, un tipo de sensación que nace en la medida que no nos logramos encontrar, varados en la desesperanza y aun así nada se detiene, como si nada pasara. Pero sacar las fuerzas de donde no las hay es la tarea que plantea Síndrome. La primera composición en guitarra que realiza, está inspirada en el vacío, en el error y el dolor del alma, según relata.
A esto le sigue el segundo track, “Me contaron muchos cuentos”, con la colaboración de Psicodélico en el beat. Esta canción tiene sus raíces en sus 17 años, una letra en la cual se descarga la rabia y se describen las cosas que se ven, más cómo deberían ser. Se puede notar la visión critica y el pensamiento explicito en una pista que hace fiel compañía a las letras.
El tercer elemento que encontramos se titula “Don Pedro” y tiene una historia bastante particular. Pedro de esas personas que uno mismo ve, en las calles de cualquier lugar, que se alimentan mas bien de lo crudo y de golpes que les da la vida, pero que cuentan con una historia de vida cargada de reflexiones, consideraciones más allá de las mundanas que nos transportan a lugares donde solo se necesita alguien con quien conversar.
“Posta en prosas” es un track que fue escrito a la edad de 18 años, que demuestra netamente la visión de rap de Síndrome, donde se pregunta a sí mismo: ¿Cómo darle sentido a este día? ¿cómo no darle rima a la vida y a la vida darle rima? Con un beat de Psicodélico la critica se plasma de una manera explícita, la reflexión llega con buen material.
A la mitad del disco nos encontramos con un relato complejo. “Hoy no estoy tan feliz” fue escrito en condiciones mas bien difíciles en que se hace necesario la descarga de alguna manera. En esta ocasión, guitarra en mano y lágrimas en las hojas, el resto está dicho.
“No estoy ni al metro” es una canción que habla por sí sola. Relata desamores, indignaciones, concentraciones actuales, que, según las palabras de Síndrome, son cosas que se despliegan en detalle en las micros y calles de Puerto Montt.
Jotaose Lagos se hace presente en “Rap forte”, un referente dentro de la trayectoria de Síndrome y con quien ha materializado un par de trabajos. Veracidad en el texto es lo que caracteriza esta pieza, las descripciones del quehacer de ambos es certero y sin titubeos, haciendo un ‘rap forte’ desde inicio a fin.
El track 8 toma la forma de un vals titulado “Caminante del mundo”. Es la última composición realizada en julio del 2020, basada en la humillación, la traición, la sensación de culpa, pero también en la resiliencia y el constante caminar y transitar que puede tomar varias rutas. La nostalgia en esta parte es clara, como también lo es la naturaleza del amor que compone el ser de Síndrome.
Asimismo, “Melómanos” cuenta con la colaboración de Waldo Palma, de Segundo Aliento, en las letras y Dj Control Habilis en el beat, con disposición absoluta de ambos en aportar en este track. El viaje hacia el interior refleja madurez para poder situarse en un punto y ordenarse, mirando lo recorrido, lo que se tiene y lo que se proyecta. Agradecer a lo que se debe y dejarse llevar en la música de manera versátil es la misión que se propone en esta parte del disco.
“Cómo que no” es un cover de la canción de Gustavo Pena, una canción desarrollada en guitarra que realiza el recuento de las postales que entrega un barrio con personas en las plazas, viendo pasar la vida a ver si hay algo mas arriba que valga la pena esperar. Aquellos personajes dibujados son quienes componen el cotidiano de cada quien que pasea por las calles en horas de la noche.
“Dedicación a mamá y papá” es el último episodio del álbum. En una garita donde esperaba una mujer, empieza a volver la idea de los padres, de los hermanos, de cuanta falta hacen en ciertas etapas de la vida. “Esta canción fue escrita en la palma de mi mano en dedicación a ellos y a quienes no tienen a sus padres en vida”, cuenta Síndrome. Con lluvia vuelven estos recuerdos de la compañía, del anuncio del almuerzo de la mamá, del picor de la barba de papa, de la vida cuando parece más simple.
Versatilidad es un trabajo donde el titulo está claramente inscrito en la variedad de ritmos y sensaciones que carga a cuestas, llevando desde pensamientos más bien inocentes, hasta las lágrimas del extrañar y del pesar. Es una montaña rusa de elementos que entregan variadas sensaciones en cada minuto de rodaje y que incitan a sentarse a escuchar con atención y apertura.
Pueden encontrarlo disponible en el canal de Laboratorio Underground en YouTube y en la principales plataformas digitales.