Milodones Frescos, el nuevo álbum de Pablo Crimini, DJ R&CY y El Sistema 407, llegó hasta mí despertando la misma curiosidad que a cualquier ser de esta era moderna podría despertarle la desconocida figura del legendario milodón patagónico, aquella especie única que habitó los rincones más australes de este terruño y cuya existencia se extinguió hace unos 10.000 años. Toda una particularidad, sin dudas. Ahora, ¿qué es lo que tiene de particular esta obra que se presenta a sí misma de esta forma? Creo que varios puntos. A ver si me acompañan en mis observaciones en la expedición a esta cueva de los milodones frescos.
Por Darío Gutiérrez O. (a.k.a. Güissario Patiño).
Callejeo y experiencia:
Vamos por parte. Pablo Crimini es un experimentado rapero oriundo de Magallanes con dos décadas de actividad. Junto a Tomi Ferro conforma el dúo Capos Crimini, a quienes descubrí en el 2015 por su no desestimable trabajo Muertos En Vida, pero antes de eso estuvo Por La Verdad Absoluta en el 2013. Fuera de la centralización santiaguina, cada zona del mapa nacional tiene su o sus embajadores, y podría decirse que ellos son la cara más visible o representativa del rap del fin del mundo. Allí Pablo se ganó el respeto y su puesto bajo el seudónimo de El Wasón, pero su debut solista no llegó hasta el 2016 con Poesía Urbana, una obra hecha con la seriedad y profesionalismo que su historia exigía, en la que referentes como Satrumentalz y el veterano malagueño DocDiamond, conocido por proyectos como Hablando En Plata Squad o Elphomega, le acompañaron en la producción musical. Su nuevo álbum, Milodones Frescos, pese a tenerlo en la primera línea con sus rapeos, cuyas reflexiones tienen un carácter o naturaleza personal, es más bien un trabajo colaborativo y no individual. Con esto me refiero a que los ritmos los compone El Sistema 407, extravagante beatmaker y emcee santiaguino que lleva los últimos años trabajando incansablemente como productor musical con el fin de situar en el circuito a su sello SCR (Soul Cochino Rappers), mientras que los scratches los propone su amigo R&CY, un hábil deejay de Bélgica que se ha hecho su nombre en la escena con su participación en importantes competencias de tornamesismo, entre ellas la DMC. Milodones Frescos fue la excusa que faltaba para conectar de forma concreta estos tres mundos que giraban en órbitas comunes, porque, claro, el extremo austral de Chile es en definitiva un país aparte unido a Chile sólo por tierra. En mi condición de “chumango”, creo que me quedó mucho más claro entenderlo con un álbum como éste.
Las tierras más australes iluminan mis canciones:
La obra se compone de quince cortes, entre ellos dos interludios y un remix. En los doce sobrantes, Crimini con sus textos nos surte de urgente identidad magallánica, ésa que desconocíamos tanto como la magnitud e importancia del extinto milodón, pero, a pesar de que el nombre de la placa se nos pueda insinuar como una oda que hace turismo por la tradición y cultural local, es fundamental aclarar que ésta se insinúa de formas mucho más cotidianas y menos predecibles. Está en ese ruibarbo para la mermelada, en esos kilos de calafate cosechados para preparar el sour, en la torcedura del viejo árbol que resiste al viento salvaje del lugar, en la herencia que dejó la crianza de sus abuelos, en las rutinas y rituales creativos que sólo un clima como el patagónico propone e inspira, así como en la pronunciación exagerada y gutural de la “ch”— que más bien suena a “gsh”—. Desahogándose en primera persona, Pablo inscribe una creíble representación de su zona y su gente, de aquel país alternativo llamado Patagonia, que no es ni Chile ni Argentina, que habla sus propias problemáticas, bajo sus propios modos y acentos. En otras palabras, es un trozo de piel de este milodón que regresa a su cuerpo original.
Por otro lado, intuyo que, en el proceso de creación, que duró alrededor de un año y medio, el autor de las letras ha tenido importantes quiebres o despertares que han elevado su conciencia. No sé, siento que en instantes alcanza puntos altísimos, compartiéndonos varias de las mejores y más sensatas reflexiones que podríamos escuchar en el día, sobre todo en canciones como “Dueños de los sueños”, “Ésta es mi voz”, “Leñadura time” o “Cuido lo frágil”; pero de pronto me parece que contamina la pureza de su santuario natural con temáticas o contenidos que hoy en día, personalmente, considero banales, como la gratuidad de esa crítica o juicio dirigido a algún tercero, pues en una cara A nos invita a desprendernos del ego, para luego en la cara B dejar que el ego hable por él. Tal vez porque estoy más perceptivo a eso en el último tiempo, y porque de verdad encontré que de los quince tracks que completan esta entrega, fácil unos cuatro están de relleno o se desvían de tan fundamental eje.
En el apartado musical, vale destacar el trabajo en la producción de ritmos de El Sistema 407, que supo obedecer a esa línea con identidad propia que destilan los raps de Crimini. Un sonido distintivo, mas no homogéneo, más bien curioso y cauteloso en su imaginativo explorador. R&CY acota con prudencia y elegancia. Con poco demuestra no ser menos, al contrario, pese a las barreras de la distancia y tal vez el idioma, es otro milodón más, y sus garras rasguñando platos suenan a equilibrio para formar el triángulo. Agradecí dar con este trabajo conforme me fui amigando con él en cada nueva reproducción, porque tiene esa capacidad de que en cada vuelta logras sacarle más sustancia. Sin embargo, pienso después de todo, que, así como el legendario milodón no fue una especie preparada para sobrevivir en una era como la nuestra, Milodones Frescos probablemente no tenga mucha más vida que lo fenomenal y esencial de su simple existencia, pues es un país centralista y centralizado como Chile, donde una ventana a estas realidades australes resultan ser un verdadero descubrimiento al estilo de Hernando de Magallanes cruzando el que después sería su estrecho; veo difícil la inserción o incorporación de un artista tan lejano como Crimini en un circuito activo como el que sólo se da en Santiago. Al menos así sería si es que no se incorpora este primero por su voluntad. Y, aun así, R&CY tiene sus cuentos y movidas en su natal puerto de Gante, allá en Bélgica. Espero que el tiempo me cierre la boca y que esta pieza no quede sólo en nuestros audífonos, sino que lleve más de su flora y fauna propia a otros rincones del país y el continente si fuera posible. Colaboran en esta cruzada Electron Magneto, Tomi Ferro, el mítico rapero zaragozano Erik Beeler, 4to Karamazov, Ekualyritmos y el beatmaker Polar del grupo Lluvia Ácida. Milodones Frescos está disponible en todas las plataformas de distribución digital de música. Escúchalo y disfrútalo desde tu favorita. También puedes descargarlo gratuitamente desde el Bandcamp del sello Soul Cochino Rappers.
PABLO CRIMINI, DJ R&CY & EL SISTEMA 407 – MILODONES FRESCOS (LP 2018, SCR)
DISPONIBLE EN: SPOTIFY | ITUNES | BANDCAMP