Qué agradable y poco usual es cuando te llega un correo con una recomendación sólo por el gusto y oficio de querer hacerte una recomendación. Y es que en lo general uno recibe correos donde es el mismo autor quien remite sus propias buenas referencias, y se entiende que tenga que ser de ese modo, pero aun así sigue viniendo muy de cerca el comentario. Y si es un tercero, éste en la mayoría de los casos está directamente relacionado con el autor del trabajo en cuestión, así que la referencia no se salva de llegar cargada con esa parcialidad. No digo que todo esto tenga algo de malo, porque es necesario hacer que la información se mueva de la forma que sea posible, pero creo que una recomendación espontánea despierta otras inquietudes que no logra una recomendación condicionada. Por ejemplo, hace unos días recibí una muy buena desde Osorno, que ya es muy raro recibir noticias de allá (crecí en La Unión). Es tan buena que no necesito explicárselas mucho, sólo decirles que le pedí al autor del mensaje poder colgarme de sus criterios para transmitirles a ustedes lo mismo que me pasó a mí con esta recomendación que me parece bastante recomendable por su forma de recomendar. Claro que antes debo aclararles que le pedí al remitente un par de antecedentes más sobre el autor de la obra, así terminar de redondear su excelente reseña, que como ustedes también podría malpensar que pudo ser escrita por un cercano infiltrado, una personalidad esquizoide del mismo artista o por un bot de la derecha tuitera, quién sabe, sin embargo, tengo mucha fe y credulidad en que la escribió “un cabro del sur” cien por ciento real no fake, y por eso la encontré genial.
Por Darío Gutiérrez O. (a.k.a. Güissario Patiño) y un cabro del sur.
Hola. Mi nombre es (aquí iba su nombre, pero ya no) y te escribo para presentarte un trabajo que no es de mi autoría, pero que, a título personal, como un tipo que escucha en su cotidianidad Hip Hop, me parece interesante. Yo soy de Osorno y el disco, que lleva por nombre Melodiálisis, fue realizado por un rapero de acá (Nekras), y es por esta coincidencia con que me llego a topar con este trabajo.
De los aspectos a resaltar, más allá del tipo de sonido que nos entrega (trabajo de sample y estilo de pistas) o la habilidad del rapero en soltar las rimas, lo interesante a mi parecer es lo que nos propone. En ese sentido el contenido de las letras va en dirección de una crítica a la sociedad, pero más que acentuar en la decadencia de nuestro modelo local, es más bien una crítica profunda al desarrollo de la humanidad en el contexto de estos tiempos contemporáneos y cómo se ha visto afectada la condición humana en este proceso. De este modo, el autor nos habla de cómo somos sumergidos por todas las instituciones de nuestra sociedad (como lo son inclusive la familia) a ser parte del engranaje del sistema en su sentido más amplio, todo esto relatado con un lenguaje común y cotidiano. Entonces bien, como algunos se sienten cómodos dentro de los márgenes, existen personas que siempre les resultará un pesar estar involucrándose en instituciones y círculos sociales con el fin de sacar réditos, pensamiento profundamente capitalista por lo demás, entonces, ¿qué hacer ante esta opresión? La invitación que nos llega es de buscar la liberación, pero no sólo en un sentido material.
El rapero trata estas temáticas de forma directa y sin muchos rodeos, como el Hip Hop mismo. También me parece valiente en el momento en que al estar estableciendo críticas a todas nuestras instituciones y quehaceres humanos, lo que en primera instancia me pareció violento y en algunos sentidos molesto, pero eso es lo que busca finalmente el autor, estremecernos, hurgar en aquellos aspectos que sabemos que no son positivos, pero que no nos aventuramos a despojarnos; y en ese sentido también no titubea a criticar a su círculo cercano y también a él mismo, y es que al parecer, en el camino de encontrarnos a nosotros mismos, primero tiene que venir el desprendimiento de todo lo que se nos fue implantado, aunque muchas veces nos sintamos cómodos con esto.
Toda esta propuesta a mi parecer esta trabajada con un sentido profundamente artístico. Los sonidos de las pistas encajan mucho con lo que se entrega en la rapeada, y a su vez, los extractos de audios, muy típicos en el rap, están conectados con el hilo del disco. Es así como en la intro tenemos el poema en pro del sistema de Rodrigo Lira, que en su profunda ironía destapaba la crueldad del sistema. De este modo, cada aspecto da cuenta de una estética muy bien meditada. Te dejo el link (DESCARGA GRATIS).
Buena onda que te hayas interesado en el disco. Le hablé al Nekras acerca de que te envié un correo mostrándote su disco y la verdad es que se sorprendió bastante. Él sólo lo había publicado por su Facebook personal, pero no había enfatizado mucho en la propaganda de su trabajo. ¿Qué más pude averiguar de él? Bueno, su nombre es Cristian Cárdenas y tiene 19 años. Empezó en el Hip Hop desde muy niño, tiene el recorrido de rebuscarse para poder llegar a grabar sus propias canciones, y en ese camino ha formado diferentes grupos con los que ha rapeado en tocatas de la zona. Su agrupación actual se llama El Mal Necesario. Tiene trabajos antecesores, pero, sin duda, su proyecto más serio que ha realizado es el disco Melodiálisis. Sobre la realización de la reseña y de ocupar lo que yo te envié en el anterior correo, estoy dispuesto a que lo ocupes y modifiques a tu gusto. De hecho, si mantienes mi anonimato como un correo que te envió un cabro del sur, me sentiría mucho más cómodo jaja. Creo que mi intención va dirigida a expandir un disco que encuentro bueno. Igualmente creo que sería bacán que te comuniques con el Nekras, es un cabro re piola y está abierto a que le converses. Además aprovechas de conseguirte una foto de él, ya que yo no pude.