J Dilla NO cambió mi vida, solo la musicaliza a ratos de buena manera, pero tampoco nada muy exagerado en comparación a otros productores de distinta índole y origen, como Stoupe, Griffi, Mr. Green, Buckwild, Madlib, Geoenezetao, Apollo Brown, Max Damage, Utópiko, Dive Dibosso, Lex Luthorz o Notz; así como tampoco me han cambiado la vida Los Beatles, Pink Floyd, Los Fabulosos Cadillacs, Juaninacka, Vico C o Mos Def… pese a que muchos de ellos sean parte de mi rutina a diario.
Mi vida la han cambiado decisiones, fracasos, amistades, enseñanzas, experiencias, e incluso proyectos, entre ellos Laceldadebob.cl, pero no por eso me verán usando una camiseta que diga que “cierta importante decisión de mi vida changed my life”. Así como muchas cosas en esta vida, creo que la memoria y obra de un importante creador en la historia del Hip Hop también ha sido convertida en imagen de fetichismo, de exhibicionismo superficial para el mes de febrero, y de traer al Hip Hop un mal de la sociedad que se ve en la cultura popular con la señora que compra el calendario de Camiroaga o el súper comunista con la billetera del Che Guevara. En lo personal, soy más del tributo reflexivo, de conectarme con la música y no con la imagen… pero bueno, cada cabro con su tema.
Pronto a la venta las camisetas: “Laceldadebob.cl don’t changed my life”